Fallo informático

Llevo años trabajando con ordenadores y usando aplicaciones informáticas más o menos complejas. Por ello me gustaría realizar unas cuantas precisiones de aquello que podríamos calificar como fallos informáticos.

En líneas generales, podríamos considerar que existen dos tipos:

  • Fallos debidos al hardware, es decir, que algunos de los componentes físicos del ordenador estén estropeados: procesador, discos duros, monitor, teclado, ratón, memoria… y que conllevan un grado de afectación mayor o menor sobre los datos almacenados en el sistema. Si son componentes fundamentales como la CPU o el disco duro, el sistema o no funciona o causa fallos aleatorios y generalizados con unas consecuencias desastrosas, como la corrupción de datos. Si son de periféricos: teclado, ratón, monitor, impresora o escáner, suelen causar molestias al usuario, pero no conllevan alteración masiva de datos, pues no los manipulan de forma directa. Asumiendo un fallo hardware importante hay que decir que los sistemas corporativos disponen de redundancia de hardware y copias de seguridad que permitirían mitigar o minimizar tanto los daños como el tiempo de recuperación. Dicho en la jerga informática, garantizar un funcionamiento cercano a los cinco nueves, es decir, al 99,999%.
  • Fallos producidos en el software, distinguiremos dos casos: por actuación de software malicioso/cracker o por un mal funcionamiento intrínseco del programa. En el primer caso lo más frecuente sería un daño masivo con intención de pedir un rescate o para una destrucción masiva de información. Y si es un error del programador, podría analizarse la repercusión, pero suele afectar a un bloque de datos que responde a un patrón concreto. En ambos casos y una vez detectado el fallo podría recuperarse la información de las copias de seguridad anteriores a la detección de la anomalía.

He dejado a para una reflexión posterior el caso de contratar a un cracker selectivo que hubiese alterado algún valor determinado y por encargo, con el fin de conseguir algún objetivo concreto, y otra opción, aquella que por un error de programación se afecte a un reducido número de casos que responda a un patrón muy, pero que muy concreto.

Tras lo expuesto y traducido al caso de la actual Presidenta de la Comunidad de Madrid, parece apuntar a un fallo puntual del programa, a la actuación deliberada de un cracker o al error de transcripción (humano que teclea o no teclea).

El fallo puntual del programa queda descartado, pues modificaría el resto de las notas de la alumna y no solo a dos, o a varios alumnos en el caso de no responder a un patrón unívoco de dicho alumno (dni, etc.). El caso de un cracker lo descarto porque sería un hecho delictivo.

Por tanto, todo se reduce a un error imputable a un humano, tal y como parece indicar la explicación del fallo informático, baste decir dos cosas: existe verificación en todo ese proceso, pero aún asumiendo una equivocación generalizada, si es a favor, el afectado no se daría cuenta ya que pensaría que la asignatura la tiene suspensa. Si es en contra, es decir, le suspenden cuando debiera estar aprobado, se enteraría en el momento de solicitar su título y, quizá, costaría tiempo y sacrificio resolver el entuerto. Habría que remitirse a las actas en papel, exámenes o lo que proceda, pero en todo caso, un acto reclamatorio documentado.

La solicitud de título no se produce, generalmente, con tanto tiempo de retraso, quizá tarde en recogerse el documento acreditativo, pero la solicitud se habría hecho de forma casi inmediata a su finalización, pues sirve como acreditación y comprobación del expediente.

Volviendo al caso que nos ocupa parece que es la alumna la que se da cuenta de que está aprobada cuando alguien de la URJC le notifica tal circunstancia.

En definitiva, que tras el supuesto fallo informático lo que existe es un fallo humano, ¿casualidad?

Finalmente, ni la palabra de un rector, ni la de un catedrático o dos, o los que se consideren, son suficientes para acreditar nada, a lo sumo necesarias, pero lo que refrenda un hecho de esa naturaleza (administrativo) son documentos con sus fechas, firmas y con sus correspondientes registros de entrada y salida. ¿copió el Rector de la URJC? ¿por dónde anda?, ¿sigue cobrando del erario público?

Canis lupus signatus

En ecología hay un concepto muy importante: ecotono. Acorde con la Wikipedia es la zona de transición entre dos o más comunidades ecológicas distintas. Tambien presenta ciertas características que la hacen especial: además de contar con flora y fauna de ambas comunidades, generalmente también dispone de especies únicas, es decir, no presentes en ningún otro lugar del mundo.

La península ibérica es un ecotono y, por tanto, desde el punto de vista ecológico un privilegio, ya que podemos observar flora y fauna de ambas comunidades (europea y africana) además de contar con variedades propias.

Este hecho debería hacernos reflexionar a todos y todas, incluidas las autoridades para insistir en una protección especial y minuciosa de nuestro entorno y si parece oportuno presumir de ello.

No es ni será la primera vez que insista en esta especificidad de la península ibérica y tampoco que proteger y conservar el entorno cuesta dinero, pero mucho menos que construir un aeropuerto como el de Castellón, otras obras infames que pueblan la geografía española o el excesivo gasto militar, no sé si para matar marcianos o subvencionar pesebristas y campañas.

Adicionalmente, y tras los variados avisos de infracciones realizados por la Unión Europea creo que abre una vía de financiación adicional. Quien señala y presume de conciencia ecológica deberá manifestarlo de forma fehaciente aportando dinero. Le recuerdo al lector el compromiso de aumento de cuotas de la OTAN a los estados europeos.

Bien, tras esta larga exposición hay un objetivo muy concreto y mencionado en el título. En este ecotono habita una subespecie o variedad única de lobo denominado Lobo Ibérico (canis lupus signatus).

Solo su existencia justifica su protección, si a ello añadimos su escasa distribución geográfica y el número de manadas existentes más trascendental resulta su conservación.

Algunos dirán auténticas barbaridades sobre él, de entre ellas está la declaración de especie cinegética, vaya, ni siquiera como ocurre con el caso de las ballenas y los japoneses con sus estudios científicos. Los noruegos, ya pasaron olímpicamente de dar cualquier tipo de explicación o excusa.

Hoy se celebró en Madrid una concentración para la defensa del Lobo Iberico, con menos repercusión mediática de la deseada, por ello y en la parte que me compete quiero difundir que la convivencia entre humanos y lobo (extensible al resto de flora y fauna) es posible y para ello existen dos medios de relevancia: educación y compromiso político en la defensa de la naturaleza.

De las pensiones y pesebristas

Como continuación de mi artículo sobre el 8 de marzo, prometí y, con un doble sentido, que esté 17 veríamos situaciones similares.

Bien es cierto que no han sido idénticas, pues los pesebristas han sido apartados. La sociedad civil es adulta y está harta de ellos, pues callan cuando deben y berrean cuando pueden, eso sí, como subvencionados, con mejores medios.

Como defensor de los sindicatos obreros y no de clase burguesa quiero manifestar el ridículo y bochornoso espectáculo en connivencia con los escasos medios de comunicación que decidieron mostrar algo de lo que estaba ocurriendo. Es imposible prescindir de sus símbolos cuando el protagonismo no es suyo. Ya les ocurrió con el 15m y desde ahí, van a remolque.

Tras esta introducción me gustaría compartir ciertas reflexiones sobre las pensiones de jubilación:

  1. Los empresarios no hacen un esfuerzo de generosidad pagando una porción de las cotizaciones sociales del trabajador. Es una detracción directa de sus ingresos por trabajo, es decir, su salario es lo que cobra más lo que no le paga el empresario por su parte de cotización a la seguridad social.
  2. Se está deslizando un concepto perverso y sutil, por parte de algunos políticos y medios de comunicación interesados o no y que cala en el perceptor de la pensión. Es aquel relacionado con que tras un montón de años de cotización le pagan una birria. Y, dado que estamos en un sistema de reparto, son las cotizaciones de los trabajadores las que pagan las pensiones de los jubilados, guste o no. Lo que algunos definen como solidaridad intergeneracional.
  3. Todo el mundo económico coincide y afirma que hoy en día las cotizaciones a la seguridad social no financian las pensiones. De otra parte el gobierno afirma que ha creado un montón de puestos de trabajo e incrementado los ingresos de la SS (los sindicatos coinciden en ello, pero con matices importantes). De estos dos hechos puede deducirse que son unos empleos basura desde un punto de vista de cantidad y también de ínfima calidad. Adicionalmente, es indicativo de que el sistema de reparto entró en crisis profunda y con pocos visos de solucionarse.
  4. Asumido que el sistema está en crisis hay dos tipos de soluciones, no hablo de parches: considerar, al igual que otros aspectos de la vida de un ser humano, que una vida digna, tras la jubilación, es un derecho humano o un derecho social y, por tanto, es el estado social el responsable de su mantenimiento, con los medios que estime oportunos (hablaré en otro punto de ello) o, la otra alternativa, como se fomenta desde los poderes económicos y algunos políticos, que se opte por un sistema de capitalización privado (planes de pensiones), pero lo que no indican, teniendo en cuenta las experiencias pasadas, salvo excepciones, los mencionados planes implican bien un bajo rendimiento, por debajo de la inflación, bien, cuando se obtiene un conjunto de fondos importantes burlarlos (rescates bancarios, etc.) o mantenerlos como mecanismo de opresión de un sistema capitalista voraz y desmedido (ejercen poder con dinero ajeno).
  5. Teniendo en cuenta la dinámica laboral existente, aquella que conduce a la explotación con falsos autónomos, contratos precarios y mal pagados, etc. Sí a lo expuesto en el punto anterior le añadimos la imposibilidad de ahorro con esos salarios… el cuento de la capitalización se acabó.
  6. A la espera salvadora y agónica de robots que nos libren de ganar el pan con el sudor de nuestra frente. El capitalismo y quizá la humanidad se encontrará, de bruces, ante el arma de su autodestrucción. De una manera simple, si no trabajas no ingresas dinero, sino tienes dinero no compras, si no compras no consumes, si no consumes… ¿qué sentido tiene producir? Es cierto que el razonamiento está incompleto, porque todo ser humano debe consumir, al menos, la energía necesaria para su conservación o desarrollo, pues de lo contrario está condenado a morir de inanición o al robo de alimentos y otros bienes por supervivencia. Obviando este escenario apocalíptico y asumiendo que el sistema de pensiones, ni el de reparto, ni el de capitalización resolverán el problema, deberá buscarse la solución en el estado social como ya se apuntó y en el sentido que indica la economista Miren Etxezarreta en la entrevista concedida a eldiario.es: una reforma profunda del sistema fiscal.

De manteros y mantas

El pasado jueves falleció un joven senegalés, sin papeles y cuyo oficio era el de mantero.

Resultan paradójicas, y a modo de resumen, dos preguntas:

  • ¿Cómo puede estar una persona 14 años viviendo en España y condenada a la marginalidad?
  • ¿Cómo puede existir un sindicato de manteros?

La no respuesta a estas preguntas es responsabilidad de los políticos y sindicalistas mantas de este país. Algunos de ellos ladrones, presuntos ladrones o hijos contumaces.

Ni siquiera, cuando son pillados in fraganti, tienen el valor y la responsabilidad de tirar de la manta, como mucho, su único acto habitual es esconder su mierda política debajo de la misma.

Es una desfachatez quedarse a nivel de los camellos o manteros, cuando se sabe de dónde se nutren los mismos para tratar de no morir cada día y convertirlos en el mal de nuestros días.

Condenar a la supervivencia, el sobresalto continuo y a la marginalidad no es ni legal ni humanitario, responde a la ignorancia premeditada de la especie ibérica denominada político-manta, que a modo de su homóloga marina, abre bien la boca para tragar todo lo que pueda, como si no hubiera un mañana y ahí acaba su similitud.

Nóos y la plebeya coma «,»

Hoy puede leerse en El País un artículo sobre los preparativos de Iñaki Urgangarín antes de ingresar en prisión.

En el se mencionan, a mi juicio, tres datos de relevancia, que ordenados de mayor a menor serían:

  1. Tres años de cárcel. ¡Toma ya! Otros pitonisos, y no sabemos si serán teóricos o reales.
  2. El disfrute de dichos momentos de libertad, previos al ingreso, y las incomodidades de la permanencia en Suiza. Dado que no es posible el acercamiento de presos internacional, la montaña suiza se acercará al macizo navarro.
  3. El disgusto y afectación de la infanta Cristina por los hechos futuros y el acercamiento consolador de los miembros de la familia real y política en estos momentos duros y de dificultad.

Ante estos hechos me imagino una situación hipotética y otra real que expondré en ese orden:

  • La no renuncia a sus derechos sucesorios podría conducir a la paradoja mucho española de tener una Reina casada con un exconvicto y no me consta, arrepentido, como la guinda que corona el sistema político monárquico vigente.
  • La tozuda realidad en palabras de Saramago, acaba imponiéndose y hará la transformación del No me consta (The Power of Love) al No, me consta (It’s Low Mood).